En esta vida humana, que Dios nos bendiga para que pronunciemos el nombre de lo Divino.Es un hecho que vivimos tan sólo un corto tiempo. ¿Qué debemos lograr en este breve lapso? En esta vida, no tenemos que olvidar qué es lo que realmente debemos lograr. ¿Qué necesitamos para alcanzar la meta esencial? Necesitamos devoción y paciencia. En tanto más paciencia tiene una persona, mejor. ¡El hecho que hayáis esperado tanto tiempo, también ha sido una prueba para vuestra paciencia! En verdad, no quise poneros esa prueba. Salí tarde de Birmingham y cuando llegué [a Leicester] los devotos tomaron mucho de mi tiempo. Eran las 7 pm cuando llegué, pero me llevó mucho tiempo venir a este lugar porque tuve que ver a tantos devotos primero. No me quedé mucho en ningún lugar, pero algunas de las visitas eran a pacientes realmente enfermos.
Por la gracia de Dios, vosotros debéis desarrollaros a un nivel superior. Grandes seres están destinados a nacer en la Tierra para establecer la rectitud en este mundo. Es por ello que nacen santos, sabios y avataras—para restablecer la devoción, para sumergir al mundo en devoción—pues en estos días el mundo está atrapado en adharma, no-rectitud, y más y más personas no están viviendo de la manera correcta.
Para restablecer esta devoción y dharma, las personas que han logrado la iluminación a través del poder de Dios, y aquéllos que están cerca de Dios, nacen en este mundo una y otra vez.
Mientras están viviendo en este mundo, no les comprendemos, pero cuando ya no están aquí. Empezamos a pensar en ellos. Por lo tanto, hay muchos grandes seres con poderes que han nacido y que nacerán en este mundo, aunque normalmente no se revelan (…) Tenemos que ser maduros nosotros para poder comprender su grandeza. No perdáis la oportunidad de estar con ellos. Tratad de acercaros a ellos y entonces ellos también se acercarán a vosotros. Si os alejáis de ellos, ellos simplemente permanecerán donde están.
Si, en esta vida, no vais a entender o ver qué es lo que se espera que realicéis, entonces ¿cuándo vais a verlo? ¿Vais a vivir 100 años antes de finalmente ver qué es lo importante que tenéis que realizar en este mundo? Puede que el gobierno de este país os permita vivir 80 años, ¡pero yo no sé si vuestra vida lo permitirá! Por lo tanto, reconoced el hecho de que esta vida es muy corta. En ese breve lapso debéis percataros de lo que es importante que realicéis y que obtengáis.
En esta vida, tratemos de comprender a estos grandes santos y a los senderos de rectitud que han enseñado. Si hubierais nacido en la época del Señor Krishna, ¿hubierais ido a verle? Dudo que os hubieseis molestado en ir a ver al Señor Krishna, porque en ese tiempo no hubierais comprendido quién era él. A él se le comprendió sólo después de que mostrara su forma universal a Aryuna y después de que dejase este mundo. Durante su vida, muy pocos devotos eran conscientes de que él era un avatar y de que él era Dios, pero hoy le conocen casi todos. Similarmente, durante la vida de Ramakrishna Paramahansa, muy pocas personas comprendieron su grandeza. Cuando Jesucristo enseñaba su dharma, ¿qué hacía la gente? Hacían planes para arrestarle y encarcelarle. En lugar de escuchar su dharma le crucificaron. ¿Quién trató de crucificar a Jesucristo? ¿Quién fue responsable de su muerte? Si observáis, veréis que fueron aquéllos que temían que él modificara el dharma que se enseñaba en ese tiempo y cambiase el tipo de fe que la gente tenía en Dios. Las personas creían en Dios antes de que Jesús llegara, pero creían de una manera diferente. Pensando que él afectaría ese modo de creer, crucificaron a Cristo por propio interés personal. Hay mucha competitividad, envidia y mucho ego entre las personas devocionales y la gente religiosa—esto existía entonces y existe ahora. Tal es la causa por la que Cristo fue crucificado. Si él hubiera vivido algunos años más, hubiese podido difundir su dharma más ampliamente. De modo similar, puede que no os deis cuenta de cuántos obstáculos tiene que afrontar [un avatar de nuestros días] para difundir su mensaje de dharma.
Yei Prema Shanti